Free Counter and Web Stats

La numismática hebrea en Hispania ha sido objeto de una manipulación historiográfica, basada en el antisemitismo. La ibérica se ha "leido" siguiendo las teorías de la Escuela Alemana de Arqueologia (heredera de la Anneherbe de Himmler), para teorizar un pueblo celta. La neoibérica se ha "leído" como si de latín se tratase. En ambos casos, la lengua hebrea queda oculta, haciendo posible el negacionismo historiográfico del pueblo hebreo.

jueves, 14 de mayo de 2009

rda [(a)rda] bronce


Las monedas que se nos han presentado supuestamente latinas de la Bética, hispano-romanas, son en muchos (o mejor en todos) casos hebreas.

Sus textos han sido manipulados para hacerlos pasar por latinos, en perjuicio de la comprensión de sus epigrafias que han pasado así a ser ocultadas y falseadas en suma.

Una de las monedas de ésta serie, en fotografía del Sylloge, "rda", bronce y "pdmrga", del verbal "pdh", pagar el rescate, rescatar, redimir.

Como nominal lo traduciríamos por "precio", "pdywm" y aquí lo tenemos en composición con "mrg" batir, trillar y ser batido, trillado.

Alef podría indicar "as"?,

Sin embargo aún superando el problema de la lectura latina de "V", que és una uve, como "U", que és una vocal, ya digo, superando éste problema inicial, si acudimos al diccionario en latín no aparece ningún señor CVRMAN, con dicho nombre o apellido, no tenemos CURMAN.

Es evidente el peso de la tradición académica, en la nómina de autores que han tratado éstas epigrafías. Las autoridades han venido apostando por Untermann en ibérico y aquí otros nos han señalado al latín, y todos han hecho lo posible por semisilabizarnos y latinizarnos.





En ésta, latina "CAR", de bronce, hebreo "rda" leyenda "M.SEPT", hebreo "tbsnm", que podría ser topónimo "bsn" (Basán). En la moneda no se aprecia ningún punto entre "M" y "S" que justifique la separación.

En hebreo se podría construir también "tb_snm", leyendo "tbh" como casco (de una nave), armazón, estructura; y "snm", punta, diríamos mejor proa de la nave. Resulta evidente su relación con la epigrafía, porque la leyenda se asocia con éstos diseños.

En latín SEPT, no existe, sí SEPTEM, como número, y SEPTEMBER, como mes. Habría que teorizar una forma acrónima de SEPTIMUS?.

La palabra "tbh", cesta, arca, arcón, caja, se utiliza en el Génesis para referirse al arca del diluvio. Se debe comparar con el castellano "ataúd", del árabe tabût. Su uso es normal para referirse al casco de las naves.

La palabra "snm", diente, punta, saliente, picacho, podría ser un topónimo: La muela, pero aquí referida a la nave sería la proa.

Mi impresión és que se trata de demasiadas coincidencias, los nombres de éstos supuestos magistrados latinos son más que raros y sin embargo la transliteración semítica nos remite y enlaza los diseños de la moneda.

La lectura "latina" está agarrada con pinzas, y además, no guarda relación con las piezas, está descontextualizada y por ello aparecen unos posibles personajes, con esos nombres tan poco comunes, sorprendentes; como única explicación.







Aquí "nsa", para señalar la calidad, elevada, de la fundición del bronce.



Aquí con "yod", "rdy", de bronce.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Archivo del blog

Seguidores